Castillo de Montpalau

Castillo de Montpalau

Situado en la cima de la colina de Montpalau, en las laderas de Pineda del macizo del Montnegre, se encuentran las ruinas del antiguo Castillo de Montpalau. La jurisdicción señorial abarcaba un extenso territorio, como una buena parte del Alt Maresme, hasta de Arenys a Horsavinyà, el límite de los dominios del castillo de Palafolls.

Siglos atrás de la construcción del castillo, este lugar había sido ocupado por asentamiento ibérico, este dejó numerosos vestigios, datables a partir del siglo IV aC. y continuó en la época romana. Es muy probable que la mayor parte de la piedra de este antiguo asentamiento se usó para construir el castillo medieval. Este castillo fue documentado desde mediados del siglo XI, cuando Umbert Odón y su mujer Sicardis (señores del Montseny), juraron fidelidad a la cuenta Ramon Berenguer y por los castillos de Montpalau (Mont Palaz) y Gironella. Fue pues a mitad del siglo XII cuando los vizcondes de Cabrera fueron adquiriendo el pleno dominio de la jurisdicción de Montpalau, una posesión que se mantuvo hasta el 1574. Y fue ese año cuando la vendieron al marqués de Aitona, el Francisco de Moncada.

En el siglo XVII, el castillo pasó por vía matrimonial los duques de Medinaceli.

De esta maravillosa fortaleza medieval, quedan algunos muros que definen un recinto de planta cuadrada. El aparato está formado con hiladas de sillares irregulares, unidos con mortero de arena y cal. Podemos disfrutar de los ángulos y la ventana de punto redondo que se conserva en base bien. En el centro del castillo había una torre cilíndrica, que actualmente está en ruinas. Podemos encontrar restos de un segundo recinto construido posteriormente, sobre el siglo XV. Fuera del castillo encontramos las ruinas de lo que fue la antigua capilla, dedicada a San Miguel.